La democracia, base de la lucha contra la pobreza

La vinculación entre democracia y economía es un tema decisivo en América Latina. No basta con la democracia electoral. Hay que democratizar el mercado. Se trata de una lucha llena de espacios. La democracia liberal no sabe ni puede enfrentar con éxito las demandas de ciudadanos pensantes en una sociedad globalizada. La nueva etapa del capitalismo ha acrecentado el empobrecimiento en proporciones geométricas. Se proclama que se trata de un proceso natural, cuando se sabe que obedece a planes y proyectos del capital financiero, que ha intentado paliar el desastre con programas mundiales de lucha contra la pobreza incapaces de resolver el problema generado por las políticas económicas dominantes. En esta situación, se han abierto espacios para la acción de grupos organizados de la sociedad civil que plantean alternativas de base ante la creciente pauperización. Pero ese combate no podrá emprenderse con seriedad sin una auténtica democracia política y social.