“Negociar con las manos» el espacio público

En la práctica urbanística se considera espacio público el que es espacio y el que es público; sin metáforas ni sobreentendidos. Es una construcción social, desde luego, pero es ante todo volumen, extensión, la anchura que contiene las cosas. Lugar. Espacio. Y además público, por donde se puede mover libremente la gente sin tener que pedir permiso. Los autores analizan el impacto de la globalización en el diseño del ámbito urbano y en las modificaciones del uso del espacio público, haciendo una reflexión en torno al espacio público urbano sobre el que se ciernen preocupantes amenazas por la proliferación de tendencias tales como las “gates communities”, la imposición de nuevos escenarios de consumo (centros comerciales, parques temáticos, musealización de las ciudades, etc.) o la extensión del modelo urbano de ciudad reptante y dispersa (urban sprawl). Por otro lado. La urbanización acelerada y caótica es un fenómeno global que ha convertido de golpe a la población mundial en mayoritariamente urbana pero con unos derechos ciudadanos menoscabados. El artículo hace mención a que la contemplación del espacio público adolece de una visión idealizada del ágora heredada de la ilustración y este prejuicio oculta otros entornos físicos, sobre los que nadie habla, que a menudo representan más certeramente el espacio democrático.