Relatos, metáforas y dilemas para transformar las exclusiones

La persistencia de la exclusión rehace los mapas conceptuales y recrea las prácticas sociales. Las representaciones colectivas inducen comportamientos, orientan la búsqueda y conforman expectativas individuales. En su interior bullen metáforas que se han construido con le legado de distintas tradiciones. Así el autor aborda cinco metáforas diferentes. La primera enfatiza “el quedar fuera y al margen” como la piedra angular en el proceso de exclusión. analiza el concepto de marginado, la producción social de la distancia, las prácticas de inserción y los límites de la ingeniería social.
La segunda subraya “el estar desviado” como el elemento decisivo del proceso de exclusión, abordando la producción de la desviación, las prácticas terapeúticas y los límites de dichas prácticas.
La tercera metáfora subraya la ruptura de los lazos que constituyen la desafiliación y debilitamiento de la vida en relación. La exclusión indica la ruptura de las redes familiares, el debilitamiento de las relaciones sociales, la fragilidad de los lazos de proximidad, para ello el autor describe la producción social de la desafiliazación, las prácticas de resilencia y los límites del modelo actual.
El cuarto relato se adentra por la experiencia del naufragio, a través del sentimiento de pérdida, de soledad, de falta de horizonte, tratando la producción existencia del naufrago, las políticas de acompañamiento y los límites en las prácticas de dichas políticas.
Finalmente, el sistema social ofrece intersticios suficientes para representar los mecanismos estructurales que orillan y expulsan a los desechables, analizados por el autor a través de la producción política de los sobrantes, las prácticas de cooperación y los límites de la representación política.