En busca de un líder

Un año más, la acción a favor de los derechos humanos por parte de los Estados ha quedado reducida al nivel discursivo de las buenas intenciones. En la práctica, las grandes potencias siguen entendiendo su prestigio en base a su poder económico o militar, y no como consecuencia de la coherencia dada por la traducción de la teoría sobre el respeto de los derechos humanos en una acción palpable sin distinción entre dentro y fuera de sus fronteras nacionales.