Bajo los pinos del patio miramos hacia atrás hacia la historia del Colegio Santa Cristina, hacia nuestra propia historia en este lugar. Las aulas se vacían, pero en sus rincones quedan los ecos de miles de alumnos y de alumnas, de madres y de padres, de profesoras y de profesores…

¡Miles han pasado por aquí!

Bajo los pinos del patio, desde las ventanas de cada estancia, Santa Cristina grita gracias a todos los que por aquí pasaron. Todos hemos aprendido muchas cosas, TODOS, y cada uno aprendió de todos los demás, porque cada uno solo avanza cuando a lo suyo suma lo de los otros, cuando comparte lo suyo…

¡Qué magnífico intercambio de vida, de conocimientos…!

Santa Cristina dice adiós al barrio y el barrio dice adiós a la Filial nº 11 del Ramiro de Maeztu, que era conocida como “el instituto”, adiós a la FUHEM más conocida como Hogar del Empleado, adiós al Colegio, adiós al “Santa”…

Santa Cristina dice adiós a todos, a TODOS, a quienes nos acompañaron durante muchos años, a quienes nos acompañaron en una brevedad de tiempo que también es recordable…

Acaba la historia de este lugar, pero seguirá viviendo mientras sigamos viviendo nosotros y qué mejor homenaje que pensar cómo fuimos y cómo somos y recordar…

Santa Cristina cumple 50 años y cierra el libro de su historia viva, pero entra en la leyenda. Las auténticas leyendas son las que crecen al hilo de los recuerdos, tuyos, míos, nuestros… y las auténticas leyendas son un impulso hacia adelante, nunca hacia atrás.

¡La historia puede dar paso a la leyenda!