Una construcción colectiva
Como es bien sabido, durante los últimos cursos, FUHEM ha venido impulsando un proceso para la revisión del Proyecto de Centro en cada uno de los colegios. En consonancia con este proceso, desde el Colegio Lourdes se ha impulsado el trabajo de construcción colectiva en las cuestiones más relevantes.
En una primera aproximación a este trabajo, durante el curso 2012-13, se formaron nueve comisiones del trabajo en torno a los siguientes temas: Bilingüismo, Ecosocial, Aprendizaje Cooperativo, Inclusión, Creatividad, Participación y Comunidad, Resolución de Conflictos y Educación Emocional, TIC en el aula y Actividades Interdisciplinares. Esta experiencia fue novedosa y bien valorada por el profesorado aunque era evidente que las concreciones de estas reuniones y los productos no fueron demasiado operativos ni concretos.
En sucesivos cursos y de manera progresiva el número de ámbitos de trabajo se fue reduciendo, consiguiendo así tener mayor nivel de concreción. En el presente curso escolar los ámbitos de trabajo más relevantes para los docentes han sido: Inclusión, Aprendizaje Cooperativo y Gestión Emocional-Convivencia. El objetivo de este trabajo ha sido, por un lado, elaborar cajas de herramientas compartidas por el centro y, por otro, identificar de entre nuestras prácticas, fortalezas y debilidades para contrastarlas con las evaluaciones externas que se han realizado en el centro durante el pasado curso.
(Trabajo de recogida de aspectos a mantener y a mejorar por parte de los docentes en cuestiones metodológicas).
Gracias a todo ello se han identificado las líneas de trabajo para la mejora en cada uno de estos ámbitos que se enumeran a continuación:
1. Sensibilización del alumnado en la etapa de Secundaria en Aprendizaje Cooperativo.
2. Aplicación de Técnicas y Normas en Aprendizaje Cooperativo, común a todas las etapas.
3. Adaptación de tareas a los distintos estilos de aprendizaje.
4. Creación de un dossier para cada alumno/a que se enriquezca, de curso en curso, con los aspectos más relevantes, académicos, estrategias metodológicas, inclusión social, etc., para alumnos con necesidades educativas especiales.
5. Elaboración de protocolos comunes y específicos para facilitar la inclusión tanto social como académica.
6. Profundización en la resolución de conflictos y convivencia en el centro.
Todas y cada una de estas líneas de mejora han desarrollado un plan de actuación que, en algunos casos, ya se ha puesto en marcha. La tercera evaluación y el comienzo del próximo curso son los momentos reservados para la elaboración de líneas de mejora dentro del ámbito metodológico.
Una vez identificadas todas las líneas de mejora en cada uno de estos ámbitos, definiremos los espacios y tiempos en los que poner en marcha las mismas, estableciendo un orden de prioridades atendiendo a las necesidades del centro.
Es previsible y deseable que durante los próximos cursos todos y todas seamos testigos de pequeñas transformaciones en lo cotidiano que nos permitan avanzar hacia los horizontes que nos hemos planteado como centro.
Sin lugar a dudas, el trabajo será lento pero firme, como lo son aquellas transformaciones que nacen con el sueño de transformarse en rutina e incorporarse a la cultura compartida.
El siguiente paso será compartir experiencias e inquietudes con el resto de la Comunidad Educativa para que ésta pueda avanzar de una manera acompañada y cohesionada.
(Reunión de puesta en común del trabajo realizado por las distintas etapas en cada uno de las líneas de mejora: Inclusión, Aprendizaje Cooperativo y Gestión Emocional).
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